Al analizar la "marcha del Alcalde", eso fue lo que vimos al final en la víspera, es necesario preguntar ¿por qué?, ¿Para qué? y nos vamos a ir a ver un poco de las causas.

Cerca de su media gestión, el alcalde municipal Cristhian Cámara Arratia, ha estado generando una escalada de contrariedades, producto de sus imposiciones y falta de coordinación o tino político para salir de ese boomerang que se lo alimenta desde el mismo ejecutivo edil.

Eso le ha llevado a sacar su caballo de Troya, para mostrar fuerza, convocatoria ciudadana y apoyo a su "gestión" o más bien, a su figura personal, porque de eso es lo que se preocupa en mostrarnos la autoridad; ya que si fuese gestión pública, atendería con mayor cuidado las peticiones del vecino.

Hay un mal asesoramiento o una empecinada razón del Alcalde, que le impide tratar como corresponde, o como manda la diplomacia política a sus adversarios, ahora reunidos en una mayoría que dirige el Concejo Municipal de Trinidad.

Pero esa es la ironía que vemos, tuvo que movilizar a la gente no se sabe como y mostrar fuerza, contra el principal órgano del mismo Gobierno Municipal, el Concejo Municipal de Trinidad; en una disputa innecesaria creyendo que así no tendrá fiscalización y las cosas se harán a su libre albedrío, pero eso no funciona en un estado de derecho, donde hay reglas que marcan el manejo público.

Hay una sumatoria de cosas, la grotesca pelea pública con el Concejo a quienes no dejó subir a su tarima en plena Chope Piesta, más la falta de coordinación y pelea insulsa con el Gobernador; luego una y otra mentira para dar la imagen que Trinidad "es una ciudad que enamora".

Lo último, pero no menos importante, la impostura, abuso de poder, usura y amenazas que ejerce la esposa del Alcalde sobre los mismos funcionarios, que ya se hartaron del abuso y realizaron la denuncia; con lo que en vez de edificar, empeora más bien la imagen de la autoridad.

Hay que lamentar el uso de la pobre gente que se la coacciona, vía junta vecinal, para que vaya con obligatoriedad a la marcha. Los más de 2.500 funcionarios hicieron su parte, cumplir una orden y cuidar su trabajo; sin embargo, pese a la esforzada acción del ejecutivo, se tuvo la escuálida marcha de ayer.

De seguir las cosas así, habría sido improductivo el 28.4% de la votación que logró el alcalde Cámara en su elección y con seguridad, se alimenta la serie de cuestionamientos de diversos sectores ciudadanos y la misma oposición política, que va pensando en serio en un revocatorio de la autoridad ejecutiva.

Lamentablemente para el alcalde Cristhian Cámara, sus acciones, mal asesoramiento y falta de coordinación lo llevó a "ir por lana y salir trasquilado", porque es notorio su pérdida de apoyo en el mundo citadino de la capital del Beni. 

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